*Narra Marina*
Después de la conversación con
Marta no paro quieta. Me visto rápidamente con unos vaqueros y una sudadera, me
peino un poco y me dispongo a salir de casa cuando veo a Blas dormido en el
sofá. ¡Blas! Ya se me olvidaba. Le despierto zarandeándole y casi le tiro al
suelo. Un poco adormilado, se pone las zapatillas y salimos de casa corriendo.
A lo literal. Llegamos al bus y pico dos veces la tarjeta. No hay sitios, por
lo que nos quedamos de pie.
-¿Se puede saber qué coño pasa?
-Víctor Elías. En la estación. Mi
vida depende de esto.
-Ahora comprendo…
En siete minutos exactos llegamos
a la estación. Me la recorro entera, pero no hay ni rastro. ¿Ya se ha ido? ¿O
es que nunca ha estado? No puedo creerlo…
*Narra Marta*
Llegamos a la estación. Carlos y
yo nos despedimos y quedamos en vernos algún día, aunque no sé si ese día
llegará. Cojo las maletas y salgo corriendo hacia la zona de la cafetería.
Tiene que estar allí. Y efectivamente. Esta apoyada en la pared junto a un
chico, creo que es Blas. Me acerco con un poco de miedo. ¿Y si no me reconocen?
Bueno, seguro que sí… espero. Veo como Blas se va un momento y me acerco a
Marina.
-Hola fea.
-Hola –me dice mirándome. –Joder,
como la necesito ahora, es que ya veo a Martus en la gente…
-Boba, que soy tu Martus.
-No puede ser… -dice abriendo
mucho los ojos. –Que… que… no…
-Pues nada, ya me vuelvo a
Zaragoza…
-¡¡MARTUUUSS!!
-¡¡MARINUUS!!
Da un grito y nos damos un fuerte
abrazo. Fuerte no, fuertísimo. Tanto que caemos al suelo. Ambas reímos, y lloramos
de la emoción. Por fin se produce nuestro reencuentro después de 10 años.
Seguimos en el suelo abrazadas y partiéndonos de la risa. La gente nos mira
fatal, pero nos da igual.
-¿Marina? –es Blas. Cruzamos las
miradas. Y de repente, siento ese cosquilleo dentro de mí que hacía tanto
tiempo que no sentía. Sus grandes ojazos me miran con un brillo especial. Creo
que tampoco se cree que esté aquí. Sonrío, y bajo la mirada un poco intimidada.
Su mirada es demasiado… asdeghgkn no sé si me entendéis, me intimida.
Marina alza la mano para que le
ayude a levantarse, y este sale de sus pensamientos y tira de ella. Hace lo
mismo conmigo. La diferencia es que lo hace con tal fuerza que quedamos los dos
pegados, a centímetros.
-¿Eres tú? –dice mirándome a los
ojos y luego a los labios. Vuelvo a sonreír.
-No sé, depende de a quién te
refieras.
-Mi Marta… mi Martus…
-Creo que sí que soy yo –digo poniendo
mis manos en su pecho.
-Siempre te he esperado.
Vuelvo a sonreír. Leo sus
intenciones, pero ahora no es el momento. Me acerco un poco más a él y giro la
cara para hundirla entre su cuello y pecho. Un abrazo que necesitaba.
-Ejem –dice Marina. Sera puta… Me
separo poco a poco de él, acariciando su brazo. Noto cómo se estremece. –No era
por cortar el royo, pero yo también quiero estar con mi Martus, déjamela un
poquito…
Reímos por su comentario y la
vuelvo a abrazar.
-¿Y este viaje? –pregunta mientras
caminamos hacia la salida.
-Quería pasar esta semana contigo
antes de que hicieses adulta y recuperar parte del tiempo perdido –digo mirando
a los dos. Noto que a Blas se le escapa una sonrisilla tonta.
-¿Y… pero… dónde te alojas?
-Aún no lo sé… tengo que buscar
ahora un hotel o algo…
-¡JÁ! Ni de coña, tú te vienes
conmigo.
-Que no, no es plan de meterme de
acoplada…
-Tú eres tonta –me dice. –Ale,
coge las maletas que vamos hacia mi casita. Además tienes para elegir si dormir
conmigo o en la habitación de invitados.
-Mm… ¿y qué me harías si duermo
contigo? –le digo bromeando. Ella me sigue el juego. Quiero picar a Blas, que
se está manteniendo ajeno a nuestra conversación.
-Pues de todo nena… esta semana
no vas a dormir, lo gozaras… -dice. La miro y estallamos en una carcajada.
-Venga, va, llama al de los bolis
bic, que empezamos esta noche –digo sin parar de reír. Es una coña que tenemos
las dos desde hace tiempo. Blas tiene cara de no entender nada. Empezamos a
hablar y él desvía su mirada hacia el suelo. Paro y le doy un abrazo.
-¿Y esto? –me dice aún en el
abrazo.
-Lo necesitaba. Te he echado de
menos.
Noto como me abraza más fuerte.
Cierro los ojos y dejo que el cuerpo sienta todo aquello que no he sentido
antes. Me siento importante, feliz. Y ahora noto como el haber esperado todos
estos años ha merecido la pena.
Me encanta!podrías avisarme cuando subas caps porfa?mi Twitter es @aiitziitxu graciias
ResponderEliminarEsta preciosa!! Me encanta :) podrias avisarme cuando subaas, en twitter soy @cris13_15 grqaxx
ResponderEliminar